Es el primer pensador que se plantea el problema del origen de todas las cosas; el problema de saber qué es aquello de lo que están hechas todas las cosas. Tales considera que detrás de la aparente variedad y multiplicidad de objetos que hay en el universo, ha de haber un elemento único del cual procedan y al cual vuelvan cuando se corrompen. Para Tales, este primer principio es algo material: el agua.
Probablemente influyó en su afirmación el hecho de que el agua necesaria para la vida y de que en ese tiempo se creía que la tierra flotaba sobre el agua, además de que él vivía en Mileto, lugar donde el mar baña incesantemente sus costas, y el ver que las semillas son todas de naturaleza húmeda, que animales y vegetales la necesitan para vivir, lo lleva a la conclusión de que todo se reduce a agua.