La procedencia del mosaico es asiática, su empleo era conocido por los egipcios, sumerios y caldeos.El mosaico se utiliza en la construcción con fines decorativos, aunque los orfebres lo han usado también en la confección de pequeños objetos ornamentales.
El mosaico fue uno de los principales elementos que el cristianismo tomó de culturas no cristianas siendo, incluso, uno de los fundamentos del arte bizantino.
La agrupación de pequeños cubos de piedra, mármol, barro cocido, vidrio o esmaltes de colores, colocados sobre una copa de cemento o yeso, es lo que logra la realización del mosaico, a través del cual es posible confeccionar diferentes formas y figuras en los interiores y fechadas de las construcciones.
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